Deficiencia de la comunicación para la Prevención (PROBLEMA) / Eficiencia en la comunicación para la Prevención (SOLUCION)

Yanina Basilico
Coordinadora Nacional del Comité Ejecutivo para la Lucha contra la Trata y Explotación de Personas y para la Protección y Asistencia a las Víctimas
Argentina

En primer lugar quiero agradecer al Papa Francisco, este hombre que hizo de su Papado una cruzada contra la esclavitud. Gracias Francisco por apoyarnos, por sacarnos de la oscuridad de la soledad. 

Gracias a Marcelo Sánchez Sorondo, nuestro querido Monseñor, por su compromiso total con este tema, por aceptarlo y aceptarnos ​y poner todo su esfuerzo, sacrificio y vida al servicio de la lucha contra la esclavitud.

Gracias a todos y cada una de las personas  que hicieron posible que hoy estemos acá reunidos debatiendo para poder dejar un mundo sin violencia ni esclavitud, lucha que tomamos como propia.

Lo que me permito hoy es invitarlos a poner en discusión las falencias o deficiencias que se observan en la comunicación de las campañas para la prevención, hay algunos puntos en cuestión que a mi criterio son las causas que no se consideran al momento de formular una campaña y que efectivamente inciden en una comunicación deficiente con sus respectivas consecuencias, por ejemplo: si hablamos de una prevención primaria suponemos una campaña dirigida a grupos de mayor riesgo y vulnerabilidades con el propósito de evitar la llegada a los circuitos de explotación, estaríamos hablando de la necesidad de transmitir un mensaje de prevención antes de que ocurra una situación determinada como por ejemplo la captación.

Situaciones que generalmente están asociadas al movimiento territorial a las que algunas personas se ven forzadas a realizar: en ellas se pueden observar en tránsito o durante el tránsito y su posterior asentamiento un sin número de vulnerabilidades que las exponen en una situación de desventaja; como dijo el Papa Francisco en el Encuentro con los Alcaldes en julio de 2015 es inexorable el éxodo de personas que se produce desde el campo a los grandes centros urbanos, manteniéndose en situaciones de vulnerabilidad que a veces son aprovechadas por las redes mafiosas. Es en esa situación de desprotección y de no contención donde se debe llegar eficientemente con una campaña de comunicación para la prevención.

El Papa nos sigue diciendo: “Si bien ésta conciencia sale del centro hacia las periferias, el trabajo más serio y más profundo, se hace desde la periferia hacia el centro. Es decir, desde ustedes hacia la conciencia de la humanidad”.

Muchas son las causas que consciente o inconscientemente nos llevan a una ineficiente formulación de la comunicación y que deberíamos revisar permanentemente.

Generalmente la responsabilidad de prevenir sobre determinadas situaciones es de los estados en sus diferentes niveles. Los estados centrales disponen de equipos comunicacionales para elaborar los mensajes que pretenden ser masivos pero lamentablemente en muchos casos no atienden a las particularidades socio-culturales de las regiones o de los grupos minoritarios, acaso los más vulnerables, de mayor riesgo y susceptibles de ser captados. Frente a la observación de esta realidad resulta necesario que esos equipos creativos incorporen a los mismos a representantes de Organizaciones No Gubernamentales (ONG)  que trabajen el tema que se desea prevenir, especialistas y sobre todo a sobrevivientes del flagelo de la trata, para tener una mirada amplia, real, territorial y no simplemente teórica y técnica; la mirada interdisciplinaria e interpersonal contribuirá a la creación de mensajes claros que visibilicen el problema que se quiere atacar y logre su cometido.

Es por ello que es fundamental que los equipos técnicos del laboratorio creativo incorporen en el análisis las pautas sociales y culturales de los destinatarios, fundamentales para lograr efectividad con el propósito.

Dentro de ese análisis se debe tener presente por ejemplo de que manera y a través de que medios de comunicación se informan esos grupos. La focalización y la adaptación de los mensajes a públicos particulares a través del canal correcto ayuda también a una utilización de los recursos disponibles para la producción y la contratación de medios.

Toda campaña de sensibilización o prevención necesariamente debería estar enmarcada en una  decisión política de los estados nacional y su bajada a los diferentes grupos receptores deberá estar articulada en coordinación con los niveles políticos provinciales y locales.

Otros de los aspectos que asegurarían la efectividad de las campañas seria la permanencia del tema en los medios masivos de comunicación variando su contenido de acuerdo a la estructuración general de la campaña. Bajo este concepto resultaría interesante contemplarse también abordar mensajes para la prevención secundaria y terciaria.  A saber, cuándo digo prevención secundaria, es dar a conocer una batería de medidas que deberían ponerse en movimiento inmediatamente luego de producido un hecho.

Existiría también una prevención terciaria que comunicaría la existencia de una asistencia a largo plazo para las víctimas sobrevivientes. Como vemos son fases importantes de la comunicación que en forma individual no tienen sentido. De ahí la necesidad de una estrategia comunicacional inteligente capaz de transmitir todo lo contenido en los puntos que recién expresaba. La necesidad de una campaña comunicacional bien estructurada, direccionada y transmitidas por los canales adecuados tiene una relación directa con los presupuestos que cada estado asigna y la determinación política de los mismos.

El desafío para los próximos años implica un gran compromiso por parte de los gobiernos que estén verdaderamente dispuestos a trabajar por la reivindicación de los derechos avasallados de las personas.

No es imposible. Se trata de una actitud frente a la vida, de una decisión política tendiente a la equidad y respeto por el ser humano, que tome la asignación presupuestaria para los temas sociales con la misma importancia que significa una obra pública y la conformación de equipos de producción o elaboración de contenidos audiovisuales amplios y participativos.

Frente a las realidades que muchos de nosotros en los diferentes lugares donde desarrollamos nuestra vida y las carencias siempre observadas, me permito humildemente proponer algunas pautas que si bien no significan la solución inmediata, seguramente abrirán nuevos espacios de discusiones en la que nosotros los jóvenes tendremos un papel determinante.

Por ejemplo

·       La determinación de una asignación presupuestaria acorde a la significación que represente para cada estado la violación de los derechos humanos   

·       La conformación de un equipo comunicacional amplio interdisciplinario que articule miradas territoriales y técnicas para elaborar los mensajes

·       La necesidad imperiosa de articular entre los diferentes niveles de gobierno, la elaboración de una ley que obligue a los medios de comunicación a ceder espacios gratuitos para sostener las campañas oficiales permanentes.

No es difícil es un desafío que tenemos de acá al 2030 en el que más allá de luchar contra este flagelo por el respeto de los derechos humanos, el reclamo va dirigido a los responsables de los gobiernos a adoptar una mirada más humanista desde la que podrían resolver estos problemas.

 

Asuntos relacionados

Los jóvenes y los Objetivos de Desarrollo Sostenible: desafíos y oportunidades

Casina Pio IV Simposio de los Jóvenes 30-31 de octubre del 2016 - Los jóvenes están en el... Leer más